Cómo organizar la ropa de los niños
A la hora de organizar la ropa de los niños necesitas tener en cuenta si ya se visten solos o si eres tú quien les ayuda. La distribución de las prendas de los más pequeños en cajones y armarios no tiene nada que ver en uno y otro caso ya que, mientras que en el primero se trata de hacerlas accesibles, en el segundo lo ideal es que estén al alcance de tu mano, pero no de las suyas, y es este supuesto el que trataremos a continuación.
1. Organizar la ropa de los niños más pequeños
Cuando tus hijos son bebés o aún son demasiado pequeños para vestirse solos, organizar su ropa no es complicado, ¡y además sabes que todo estará siempre ordenado! Al pensar en clasificar sus prendas, tienes que encontrar la distribución más práctica que te permita ganar esos minutos extra que las madres siempre tratamos de arañar al reloj. Para lograrlo:
– Emplea las zonas que están más a la vista y más al alcance para guardar las prendas de temporada.
– La ropa de otras temporadas y la que no está en uso (porque aún es grande o porque ya se ha quedado pequeña) no debería ocupar espacio en sus armarios y cajones. Si tu casa dispone de sitio suficiente, llévala a otra habitación donde la puedas almacenar hasta que la necesites. Si careces de ese espacio de desahogo, emplea bolsas de vacío etiquetadas para minimizar el espacio que esa ropa ocupa.
– Clasifica la ropa por gamas de color. Esto te permitirá abarcar de un solo vistazo tu repertorio de posibilidades para combinar partes de arriba y de abajo, pudiendo variar más a menudo.
– Puedes destinar una zona distinta del armario para esos conjuntos de ropa más especiales, si quieres que no se arruguen o estropeen por el roce con ropa de diario, que entra y sale más a menudo.
2. Complementos y zapatos: aprendiendo a organizar la ropa de los niños
Lo ideal es que accesorios, complementos y zapatos estén en la misma habitación en la que guardas el resto de la ropa de tus hijos. De esta forma, te resultará más sencillo encontrar lo que buscas en cada ocasión.
Sin embargo, a la hora de organizar la ropa de los niños, has de prestar especial atención cuando busques el lugar donde guardarás este tipo de cosas, ya que es importante que no caigan en sus manos.
Los zapatos con su suela sucia y los complementos y accesorios, que muchas veces cuentan con aristas o incluyen partes de pequeño tamaño pueden suponer un riesgo para su salud. Así que evítalo desde el principio situándolos en zonas fuera de su alcance. Mucho mejor si además los guardas en cajas o cestas, para que no puedan ver su contenido y empezar a hacer planes…