Cómo quitar manchas de tomate y no dejar ni huella

A cierta edad parece que los niños no pueden acabar el día sin alguna mancha de tomate en su ropa. Es como si los tejidos de algodón actuasen como imán ante determinadas salsas. El problema está claro, lo que no lo está tanto es la solución, que dependerá en gran medida de la rapidez con que se actúe.

1. Quitar manchas de tomate que se acaban de producir:

Lo primero que debes hacer es retirar todo el tomate que no haya penetrado en el tejido. Para ello puedes utilizar alguno de los cubiertos que tienes a mano (mejor que un trozo de papel o una servilleta, ya que así podrías ensuciar más la ropa manchada). El siguiente paso es introducir la prenda en una solución de agua muy fría, donde hayas incorporado algo de detergente de forma previa.

2. Quitar manchas de tomate cuando ya llevan un tiempo en la ropa:

Es la situación más común cuando tus hijos se quedan a comer en el comedor del colegio, pero tiene solución. Deberás crear una mezcla de agua y vinagre (cualquier tipo menos el balsámico y el de vino tinto), que aplicarás sobre la mancha de tomate en la ropa del niño. Deja actuar y después lava normalmente.

Todo lo que necesitas saber acerca de cómo quitar manchas de tomate

Tanto si la mancha es reciente como si lleva tiempo en la ropa, puede ocurrir que la mancha persista o deje una sombra que estropee la prenda. Si esto sucede, empapa un algodón en alcohol y aplícalo con ligeros toques sobre la mancha o lo que quede de ella.

La persistencia de las manchas de tomate, cuando se trata de salsas, en muchos casos dependen de la cantidad de aceite que contienen, por eso, a la hora de actuar si las soluciones propuestas no funcionan del todo bien, puedes combinarlas con algunas de las ideas que te damos para quitar manchas de papilla o manchas de rotulador de la ropa de los niños.